Stevie Nicks "24 Karat Gold - Songs from the Vault" (2014)

ACIERTOS Y CORAZÓN

Con la magia de quien tuvo la belleza en sus manos, tanto física como musical, Nicks vuelve con un trabajo arqueológico que busca en lo que se compuso pero jamás se publicó con un resultado notable.

Cada disco es un universo cargado de sorpresas que por lo normal no llegan a estallar. Los estados de ánimo, el interés, la tolerancia o la capacidad de recepción son clave a la hora de absorber la posible magia que se esconde tras una colección de canciones. Con "24 Karat Gold - Songs from the Vault", el resultado ha de ser satisfactorio. Por lo mucho que da y lo poco que quita. Por su poso clásico, con canciones escritas bajo otros procesos y otras visiones. Con ese componente mágico que convierte un tema en un hito identificable dentro de la historia de la música.

El nuevo, viejo, trabajo de Stevie Nicks es una de esas obras. Un disco que desde su arranque con "Starshine" ya avisa que el viaje será un camino repleto de ilusión y nostalgia a partes iguales. Quizá Nicks queme sus big guns excesivamente pronto. El binomio "The Dealer"-"Mabel Normand" son piezas capaces de arrancar una lágrima, de erizar el bello y punzar un escalofrío en algún lugar del espinazo. Ejercicios puramente emotivos de rock de otros tiempos con sonido 2014. Dos de las mejores composiciones del año.

Clip oficial de "Lady".

Nicks no esconde el peso de Fleetwood Mac en su legado. Es plenamente visible. Más teniendo en cuenta que estas composiciones están compuestas a lo largo del tiempo y que muchas nacieron hace décadas en sesiones de grabación, giras y descansos de su banda madre. Obviamente, Fleetwood Mac, los radiofónicos, no son ningún problema. Las guitarras de ensueño están ahí, los componente FM también.

La voz de la diva refleja el paso del tiempo con una belleza cautivadora. Los años no se van sin más pero las pócimas son más eficaces. "Blue Water", "24 Karat Gold", "Lady", "All the Beautiful Words" y "Carousel" son las luces que alumbran un camino precioso, emotivo e histórico ante el que solo cabe estar agradecidos. Uno de los grandes discos del año, con algunas de las mejores canciones del año. Y pasará muy desapercibido.

7.8